domingo, 6 de diciembre de 2009

Vagones

A Romina y Julio no les pude ver sus caras. En la estación 86 del subway de Manhattan hacía un frío que taladraba los tuétanos. Él hundía su rostro en el hombro de ella que hundía su rostro en el hombro de él. Ninguno de los cientos de pasajeros parecía darse cuenta de la presencia de esta pareja sentada en un banco del andén. Julio abrazaba a Romina que abrazaba a Julio, en uno de los más crudos inviernos. Ninguno de los trenes se quedaba a esperarlos. Los vagones andaban deprisa dejando y recogiendo pasajeros, pero no a «vagones» como Julio y Romina, que lucían sucios, pero estaban limpios. El corazón de Romina funcionaba bien, como el de Julio; pero ella estaba enferma, igual que él. La mente de Julio funcionaba bien, como la de Romina; pero él estaba enfermo, igual que ella. Y el mundo no podía curarlos, tal vez porque fue quien los contagió con ese tren de vida. Quizás el mundo está más enfermo que Romina y Julio en aquella plataforma, sentados.


Título del próximo cuento: ADA DE CUENTOS
Se posteará: domingo 13 de diciembre

3 comentarios:

Con tinta violeta dijo...

Le sobra el quizás: el mundo está definitivamente enfermo, de sordera, de incongruencia, da falta de libertad, de pecado...de...de...
Sin embargo aún es tiempo de esperanza, si Romina y Julio pueden permanecer abrazados, hombro con hombro a pesar del ciego mundo que gira a su lado sin verles.
Buena historia.
Have a nice week, my friend.
Kisses from Spain
Dove.

Ivelisse Paulino dijo...

Hay muchos Romina y Julio en nuestro diario vivir. Mueren de frio, de hambre, sucios, con algun vicio cualquiera. Los rechazamos y los aislamos como si no fueran parte de este mundo, cuando fuimos nosotros (el mundo) quienes lo arrastramos a donde ellos ahora se encuentran. Cuando somos iguales y estamos en la misma condicion pues aunque andemos limpios (de ropa) no significa que no estemos sucios (del alma) por lo que al final somos peor que aquellos que andan vagando por las calles sin saber que existe un Dios que sana y limpia.

Un abrazo... XOXO

Yuan dijo...

Hi Dove:
Romina y Julio son una versión actual de Romeo y Julieta. Los vi por el tren 1 del metro.
Have a nice week, you too!

Ivelisse:
Dices: "con algún vicio cualquiera", creo que el "vicio" lo tenemos los contempladores-espectadores (o ignoradores).
Abrazos!!