El avión la soñaba. Desde su altura divisaba a la barca, embelesado por su hermosura. Esperó el viento oportuno y se alzó revoloteando. Planeó esquivando las ramas del árbol, curveó su ruta aprovechando la corriente adecuada, evitó un farol, y se dirigió directo a su amada; pero no queriendo asustarla como un kamikaze, resolvió desviarse de la barca. El vuelo, que nada más duró cuatro interminables segundos, finalizó con el avioncito de papel estrellándose en las aguas de la fuente del parque, a 13 pulgadas de la barquita de papel.
Ella, al verlo mojado y agonizando, empezó a llenarse de tristeza y de agua.
Instantes después, los dos papeles deformes fueron recogidos por el cuidador del parque. Antes de tirarlos al bote de basura, los unió formando un bollo. Avioncito se reanimó, y barquita estaba feliz, sin agua, pero con su amado, hasta que la trituradora los separe.
¿Quién sabe si, luego, en el proceso de reciclaje, se fundirán para siempre?
Título del próximo cuento: LA ESTANCIA
Se posteará: domingo 6 de septiembre
5 comentarios:
jaaaaaaaaajajaja!!! k chuleriaa!!!!!! me encantoooooooooooooooooooooooooooooooooooo
abrazo!!
talvez se conviertan en un hermoso papel tapiz para algún tren dónde se encuentren muchos enamorados :D
Hey!
Acabo de llegar de un viaje muy especial por España e Italia. Creo que mi amada y yo viajamos en uno de esos trenes con papel tapiz.
Abrazos para ustedes!
Una historia de amor muy sugerente. ¿quizas terminen siendo de nuevo la hoja de la moleskine donde tomo mis notas para los cuentos...
Lo importante es terminar siendo uno con quien se ama...lo demás no merece la pena.
una abrazo desde España.
Hola Paloma:
Estoy seguro: se convirtieron en la hoja de papel en donde tomas notas para tus cuentos. Por eso disfruto tanto tus escritos: pasaron primero por un papel hecho de amor fundido.
Abrazo!
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